Organización de las ideas del texto:
El texto presenta una estructura argumentativa inductiva, ya
que los dos primeros párrafos junto con parte del tercero forman parte de la
presentación del tema y el cuerpo del texto argumentativo, y en la conclusión
(la última oración del último párrafo) encontramos la tesis del autor, al final
del texto.
Entonces, podemos organizar las ideas del texto de la
siguiente manera:
Primera parte (primer párrafo): Presentación del tema,
situación de la inmigración en nuestro país. Encontramos ideas secundarias:
-
Visión positiva del concepto de naufragio: de
niños, encontrar una botella en la orilla con un mensaje dentro era mágico.
- -Revaloración de los principios de los españoles:
lo que antes era mágico, hoy día es una aberración.
-
Argumento de prejuicio: parece que negamos a los
inmigrantes, parece que los españoles sienten que les están invadiendo.
- - Argumento afectivo, en el que se incluye el
propio autor: parece que nos gustaría salvar al posible náufrago que escribe un
mensaje en una botella, que a un inmigrante real, que vemos llegar moribundo de
entre los mare.
Segunda parte (párrafo segundo y tercero): Cuerpo
argumentativo:
- - Respuesta de la sociedad española ante los
mensajes dentro de una botella de un posible náufrago:
§
Nos haría tanta ilusión hoy día como en nuestra
niñez (comparación temporal).
§
Ejemplificación: empresas, escritores, políticos
estarían profundamente interesados por el caso, y no lo dejarían pasar.
- - Respuesta de la sociedad española ante los
inmigrantes de carne y hueso, de hoy en día:
§
Argumento de prejuicio: desvalorización de la
vida ajena a la española.
§
Idea crítica negativa hacia la gestión política
sobre la inmigración: los políticos se quieren desentender de vidas ajenas, ya
que eso supone mucho trabajo y requiere una mayor organización y eficacia en
las oficinas de inmigrantes.
§
Los políticos estudian cómo disminuir este
trabajo: disminuir la inmigración.
Tercera Parte (última oración del tercer párrafo: Mientras
los cuerpos...): Tesis del autor:
- -Crítica a la política de inmigración de nuestro
país.
- -Reafirmación de la idea utópica de la sociedad:
un sueño idílico en el que una botella tiene un mensaje dentro.
Tema:
Fracaso de las políticas de inmigración e idea negativa
generalizada sobre los inmigrantes.
Necesidad de un cambio de principios en las políticas de
inmigración en España, para afrontar las continuas llegadas.
Resumen:
Durante la niñez soñamos con encontrar un mensaje de un
náufrago dentro de una botella, e incluso hoy día nos resultaría muy
interesante, sobre todo a los medios de comunicación y políticos que
aprovecharían para establecer el titular. Sin embargo, la realidad de las
políticas de inmigración hoy día, distan de aquella idea de aceptación al
extranjero. Por ello, es necesario un cambio en la política y en la sociedad
que nos rehumanice.
Comentario crítico:
Se trata de un texto periodístico, cuyo autor Juan José
Millás publicó en El País en 2003. Concretamente se trata de una columna
periodística, cargada de ironía, metáforas que permiten acercarnos a la
realidad que critica, la política de inmigración en España, la cual podemos
observar que es bastante objetiva, en el sentido de que no se aleja de nuestro
propio día a día. Este recurso simbólico y sarcástico se ve reforzado por la
estructura circular que emplea el autor para rememorar el sueño que todo niño
tiene, en una metáfora completamente congruente y acertada: un mensaje dentro
de una botella.
Millás comienza el primer párrafo con la anécdota
generalizada de que todos, de pequeño, soñamos con encontrarnos con una botella
con un mensaje dentro en la orilla, cuya finalidad es establecer la comparación
de la visión que teníamos del náufrago que nos gritaría en un papel “SOS” y la
visión que hoy en día se tiene del inmigrante. A través de esto, el autor pretende resaltar que
nuestra sociedad es cada día más despreocupada por lo ajeno, que nos gusta
pensar más que una botella puede tener un mensaje dentro a actuar y ayudar
directamente al desamparado navegante.
A que lo que quiere llegar el columnista es a la conclusión
de que la sociedad española, en la que obviamente incluye a todos los
españoles, es una sociedad egoísta y que vive por y para su propio interés.
¿Quién nos ha enseñado esto? ¿Por qué hemos permitido esto? Quizá el sistema
capitalista, implantado hoy día, nos haya dictado estas normas. Nos dicta que
todo está establecido, que la ley de la oferta y la demanda dirigen el
equilibrio de la economía y la sociedad. El caso es que el sistema capitalista
se ha consumido en los últimos años. Tal como el proteccionismo llegó a su fin,
el capitalismo pocos días le quedan.
Los políticos, algo más especializados en económicas que una
persona de clase media, ante esta situación caótica del país, lo último que
piensan es en encargarse de problemas que proceden del exterior, ¡ya que
bastante tienen ellos ya con los internos!
Esta es la razón por la que la política actual haya
implantado leyes totalmente deshumanizadoras. Lo peor de todo, es que nosotros
(la clase no especializada) aún sabiendo todo esto, lo permitimos. ¿Por qué? Se
podría preguntar alguien. Pues, me atrevería a afirmar que la pluralidad de la catástrofe
nos hacen insensibles, es decir, la abundancia de moribundos que desembarcan en
nuestras costas nos son indiferentes ya que lo vemos como una catástrofe que no
podemos resolver fácilmente. Como es difícil, preferimos dejarlo en manos de
otros. ¿Pero quién?
La verdad es que ponemos una confianza ciega en unos
políticos que constantemente nos defraudan y nos mienten. Pensamos que ellos se
harán cargo de los cuerpos que caen muertos en las orillas de las playas del
sur. Pero no es así, desafortunadamente. Ellos, como la mayoría de los
españoles, buscan las facilidades incluso cuando no las hay. Es el exceso de
burocracia de la que habla Millás. A través de la ironía, el autor critica la
ineficacia de la política de inmigrantes, que es capaz de legislar y llevar los
papeles en regla antes, incluso, de ayudar al que te está dando un grito de
“Socorro”.
Es la angustiosa vida del inmigrante, la que se pone en
juego en el texto. Millás nos hace reflexionar sobre el ayer y el hoy,
comparando los principios morales, además de mantenernos en el recuerdo de
nuestra niñez, en la que todo era tan fácil que estábamos dispuestos a todo. No
estábamos satisfechos con nada. Hoy nos conformamos con anda, aunque hay
excepciones.
Creo que la visión occidental implantada, proviene
claramente de una institución grandísima pero a la vez inválida para mí, que es
la iglesia junto a la religión Cristiana. Ella ha hecho de nosotros unos miedos
que solo buscan la estabilidad, lo que supone un egoísmo y egocentrismo
tremendo, aunque no lo parezca. Todo ello puede afectar al tema que nos
concierne, la inmigración, claro. Nos hemos adaptado a eso (o quizás nos lo han
implantado sin darnos cuenta) y no sabemos salir de ello.
Es indudable que la capacidad de adaptación escasea tanto en
la política española como en la sociedad, como los libros escasean en “Gandía
Shore”.