miércoles, 30 de enero de 2013

J.R. Jiménez (estructuras e ideas de poemas)


1.Somnolenta
El poema Somnolenta de J.R. Jimenéz pertenece a la época sensitiva del autor donde su literatura esa bañada de rasgos románticos y simbólicos.
En un primer lugar, el poeta nos sitúa temporalmente en el presente, y podemos deducir el estado  de ánimo actual del autor a partir de las descripciones precisas de una seria de elementos simbólicos, tales como “la tarde con triste misterio” que deja ver la angustía del autor ante la ausencia de la amada, también la muerte en “el fatal cementerio” que sería una opción ante la soledad y la melancolía que siente.
A continuación aparecen descripciones metafóricas del paisaje que está divisando a través de sus ojos tristes, a la vez que intenta exagerar la belleza de la naturaleza, de sus colores y sus flores, a la que una vez perteneció y que añora.
Es ahora a través del deíctico “allá lejos” donde da un salto temporal para evocar a la imagen de la felicidad anterior. Además está recordando algún momento en el pasado en el que está junto a su amada, y además consigue dar una descripción delicada de ella en forma de una metáfora “la sombra con cara de lirio y nieve”, donde destaca el color pálido que le recuerda de su cara blanca y bella.
Por último, los últimos versos indican que la situación que describe el autor es un bonito sueño de añoranza y tristeza, cuya significación no es más que la dolorosa situación que tenemos cuando el amor desaparece de nuestros caminos. Todo camino llega al cementerio, como toda vida llega a su muerte.
Destacar que existe una estructura circular en el poema, ya que la idea inicial se repite en los últimos versos.


2. Nubes
Nubes de Almas de Violeta tiene una estructura métrica de soneto en la que el autor distribuye las ideas de la siguiente manera.
Comienza con una estructura atributiva en el primer cuarteto, donde quiere reflejar metafóricamente la piel blanca y tensa de la amada a través del símbolo de la nieve y de un paisaje perfecto (una pradera así).
En el segundo cuarteto comienza su estado de insatisfacción por el hecho de que un sueño es bonito pero no real, donde intenta trasladar al lector a su mundo interior que caracteriza al lector.
Es en el primer terceto donde destaca la estructura de contraste, que predomina en el poema, ya que lo que realmente relaciona el autor en este poema son dos mundos, el de los sueños e ideal con el mundo real y de continua soledad.
Lo que le gustaría alcanzar es la felicidad que consigue en el mundo de los sueños, ya que en ese mundo divisa de una forma clara la belleza de su amada; sin embargo, en el mundo real se tiene que conformar con el simple recuerdo de una posible vida mejor.

Rimas
3.  Este poema de las Rimas de J.R., parece reflejar todo el color del paisaje: el jardín desierto, el cielo rojizo cuando atardece…
Constantemente hace referencia a la renovación del amor, que parece ser infinito, tan infinito como el cielo. Esto se observa cuando dice “olor de flores nuevas”, que simbolizan la gran variedad de bellezas que existen.
Pero es en la última estrofa, donde se observa el desconcierto del autor en el amor, ya que no está seguro de elegir bien y además se ha dado cuenta de que no va por buen camino, lo que le puede llevar a una soledad infinita. Esto lo simboliza “las estrellas” que siempre lo están observando.
Por tanto, la estructura predominante es la inductiva, ya que la conclusión final del autor se encuentra al final del poema, donde él mismo se da cuenta de su propia situación, ciertamente desconcertante.

4. En esta rima, el autor hace un profundo análisis espacial de un lugar vacío, en el que reina el silencio. Cualquier movimiento retumbaría en aquellas circunstancias.
Son constantes las referencias a la oscuridad, a la monotonía y a la soledad de una vida sin chispa vital, es decir, una monotonía que puede llegar a ser mortal.
Pero derepente, se observa la aparición de algo que resplandece, algo que le hace feliz pero que es desconocido, misterioso. A partir de ahí, el autor explica el sentimiento de excitación que acaba en inhibición, ya que no llega a conocer a la amada.
En la penúltima estrofa, se denota la tristeza por la desesperanza por no encontrar a la persona a tiempo.
Por último termina contando, que nada ha cambiado y que permanece en el mismo estado de soledad y tristeza.
Por lo que la estructura predominante es la circular, ya que el poeta transmite su estado emocional y en este caso la idea inicial es la misma que la final.

Arias Tristes
6. El poema presenta una estructura deductiva, ya que comienza con una pregunta muy general y va dando detalles durante el poema para llegar una respuesta.
Lo que refleja el poema es el misterio, la duda  y la desesperación del autor en su vida en soledad. El tiempo transcurre a la vez que va creciendo la incertidumbre.
EL “nombre lleno de amor y nostalgia” puede referirse a la amada, a la cual ama y aprovecha los momentos de la noche con ella. Pero a la vez se da cuenta que finalmente se encontrará solo en la noche, por que nada es para siempre.

domingo, 27 de enero de 2013

Antonio Machado

Soledades. Galerías. Otros poemas: LXXVII.

Respecto a la métrica, el poema se compone de seis estrofas que combinan versos endecasílabos y heptasílabos. En cuanto a la rima se observan distintas estructuras: las dos primeras estrofas son serventesios renovados con rima consonante, pero a partir de la tercera comienza una silva arromanzada propia del modernismo de Machado, con versos libres en los impares y versos con rima asonante en los pares.

Elementos modernistas:
El poema comienza con una descripción que dará pie en la última estrofa al tema central de la obra: LA búsqueda de la existencia de Dios.

Tal descripción de la tarde simboliza la vida y estado de ánimo del poeta en esos momentos, caracterizado así por la soledad y la melancolía, además hace referencia a la vejez.
También está presente el tiempo, sobre todo cuando habla de su niñez, con la que quiere expresar el paso del tiempo, la tristeza al recordar momentos mejores.
El amor está presente en sus palabras cuando hace referencia a su corazón, dolorido y lleno de pena, que no detiene su angustia.
La vigilia está presente en forma de reflexión, de recuerdos inconscientes ("pero recuerdo y, recordando digo..")
Por último el tema fundamental se acentúa en las tres últimas estrofas. El sentimiento que se expone es la vagancia del poeta y la búsqueda de respuestas a preguntas a cerca de la existencia de Dios. Hay un doble simil donde expresa su desorientación mediante en ejemplo de un perro que no tiene camino, es decir, que está perdido en la vida, y también a un niño sin rumbo e inseguro.


Campos de Castilla: A un olmo seco.

Al principio del poema se describe un olmo concreto, situado en España cerca del Duero, por lo que aparece de forma latente el tema de los paisajes de Castilla que caracterizan a esta obra. Es intensa la descripción del paisaje, así consigue crear una imagen en la mente del lector, transmitiendo la pena que da el árbol agonizante, que está deteriorado por el paso del tiempo y por agentes externos (arañas que trepan).
La primera interpretación que le puedo dar al símbolo del olmo, es que hace referencia a la enferma esposa del poeta, y en el seno del sentimiento observo el dolor por la muerte (destrucción del árbol) pero a la vez su esperanza en los milagros de la vida y en la capacidad de recuperación del árbol con el paso del tiempo.
El "camino" vuelve a simbolizar la vida, en este caso a borde de la muerte ("al borde de un camino").

Otra interpretación puede ser que Machado no esté describiendo la situación de su mujer, sino la situación de una España en decadencia y destrucción, pero a la que se le suma una actitud positiva del autor que tiene esperanza en una futura renovación y modernización del país.

En cuanto a la métrica se observan versos endecasílabos y heptasílabos, formando dos serventesios renovados iniciales seguidos de dos estrofas de tres versos con rimas peculiares, y una estrofa final donde varían los versos y donde la rima predominante es la consonante.



jueves, 24 de enero de 2013

Juan Ramón Jiménez

Somnolenta. (Ninfeas)

Este poema de J. R. Jiménez, pertenece a la época más modernista del autor, es la perteneciente a su primera época, la cual evolucionará hacia una poesía más complicada y diferente.
Se observan rasgos románticos, elementos misteriosos de la naturaleza como "el sol" y también elementos más simbólicos como es "el cementerio", el cual expresa una obra teñida de tristeza influida por el romántico Bécquer y simbolistas franceses.

Respecto a lamétrica  y el ritmo, el poema se compone por versos alejandrinos, por lo cual modernistas, y además con una rima consonante. También es apreciable un ritmo constante, dirigido por acentos y pausas entremedio del verso.

Otro aspecto modernista en el poema, lo extraemos de las alusiones y descripciones de cosas coloridas, los colores producen efectos sensoriales al igual que sus amigos, los modernistas.

Nubes (Almas de Violeta)

Existe en el poema un efecto panteista en el que se ensalzan los elementos naturales como seres divinos y perfectos(la luna, nevada de los cielos). Ahí comienza la búsqueda de belleza del autor, y además su ansia de eternidad se ve reflejado en "el alma espera".

El poema narra la desesperación del poeta ante la amada que cada vez se aleja más, a la vez que se embellece. Nos extrapola a un mundo de misterio, desconocido, lejos de la actualidad, donde el protagonista es él y su melancolía.

En cuanto a la métrica, vemos versos modernistas, predominando el endecasílabo y la rima es mayoritariamente asonante.

La flor es un símbolo que recorre toda la carrera poética de muchos poetas del momento, influenciados por el misticismo del romanticismo, a la cual atribuimos valores de sensualidad y misterio, a la vez que de perfección.


miércoles, 23 de enero de 2013

Leda.

Rubén Darío.

El poema Leda por Rubén Darío describe características esenciales del modernismo. El cisne es un símbolo del modernismo. Como un animal es parte de la naturaleza y también hace referencia canciones que pueda cantar y por eso tiene que ver con la música, con armonía, con la perfección natural.
Produce un gran efecto sensorial a través del color azul, ya que activa nuestros sentidos y quizás la imaginación nos traslade a un lugar lejano, lleno de exotismo y esteticismo, en el que nos sentimos completos, al igual que un cisne se siente en el lugar idóneo cuando nada por la superficie de un lago.

El símbolo de la flor (labios en flor) es típicamente modernista, por el cual se ensalzan los valores de belleza y perfección.

Por otro lado, se observan el intento de renovar el significado de las palabras usuales, por el cual se crea un nuevo lenguaje poético, más abstracto y oculto, que se asemeja, a su vez, a la tendencia escapista del autor.

Era un aire suave de pausados giros...

Rubén Darío.

Desde los primeros versos, el autor hace referencia, aunque de manera implícita, a formas de la naturaleza y la belleza que ésta implica, quizás descubriendo un nuevo mundo que parece mejor que el que podemos imaginar. Esto se plasma en “junto a los ramajes, “un aire suave”… Además se encuentra integrados elementos que dan una sonoridad capaz de sobresaltar las barreras del papel, llegando hasta los propios sentidos del lector (“acariciaban los sedosos trajes”, “dulces violines de Hungría”).
Hay bastantes menciones a hitos mitológicos, que descubren el escapismo del autor que se refleja en la traslación al exotismo de otros tiempos, tal como “las flechas de Eros, el cinto de Cipria, la rueca de Onfalia.”.

Respecto a la métrica se observan versos endecasílabos y dodecasílabos donde la rima juega un gran papel, y donde no siempre es continua, aflorando entonces una renovación. También se aprecia una cesura en los versos, semejante a los versos bimembres.

Importante también símbolos como la flor, que refleja la búsqueda de la perfección, el esteticismo y la formalidad en los versos de Rubén Darío.

Por último, resaltamos el papel de las transmisiones sensoriales, ya no solo naturales, sino sensuales, donde exalta la pasión a la vez que un vago sentimiento de melancolía. 

miércoles, 16 de enero de 2013

Contexto de finales XIX. Regeneracionismo. Existencialismo


Crisis española de finales del siglo XIX- principios XX.

A finales del siglo XIX, España sufre una gran crisis tanto política como ideológica y social.
En 1874 Don Alfonso de Borbón es declarado rey tras un pronunciamiento militar de Martínez Campos, como reacción al Sexenio Democrático que se vivió años atrás. Este Rey inaugura el régimen de la Restauración, el cual tenía características singulares. El sistema político (canovista) fue ideado por Cánovas del Castillo y éste concibió el funcionamiento de la vida política española sobre la base de dos partidos políticos dinásticos, lo que se llamó bipartidismo: Partido Conservador  fundado por Cánovas, y el Liberal, liderado por Sagasta. Teóricamente el cambio de poder debía regirse por los resultados electorales. Sin embargo en la práctica, el sistema era totalmente corrupto, los líderes se ponían de acuerdo para ceder el poder cuando conviniese. A todo el  método de fraude electoral se llamo “oligarquía y caciquismo” que en principio dio estabilidad política, pero que fue, a su vez, la primera causa de la crisis del sistema.
La muerte de Alfonso XII en 1885, abrió paso a la Regencia de su esposa Mª Cristina (hasta 1902) ya que su hijo era menor de edad.
La regencia afrontó la primera gran crisis, la del 98, protagonizada por las guerras de independencia de las últimas colonias (Cuba, Puerto Rico y Filipinas) donde tuvo gran protagonismo EEUU y sus intereses económicos. También, se las primeras críticas al sistema por parte de los propios políticos. Tuvo un gran papel la recuperación de partidos republicanos, nacionalistas y el movimiento obrero que cada vez se pronunciaba más, reclamando derechos y criticando al régimen.
Mientras Europa se adentraba en la gran carrera imperial, tras las pérdidas de las últimas colonias en ultramar, España queda excluida del reparto colonial.
Cuando, en 1902, Alfonso XIII fue declarado mayor de edad (a los 16 años) e inicia su reinado, hasta 1931, el sistema de la Restauración presenta claros síntomas de crisis: pesaban mucho la práctica caciquil y la farsa electoral y, sobre todo, las secuelas del “desastre del 98”. Desde el inicio de su reinado, Alfonso XIII dio claras muestras de su interés regeneracionista.
Todo ello favoreció a la intensificación del regeneracionismo y la aparición de la Generación del 98, movimiento literario interesado también en el cambio, modernización y europeización de España.
Desde el inicio de su reinado, Alfonso XIII dio claras muestras de su interés regeneracionista.

A partir de 1909 experimentó una serie de crisis y problemas que condujeron definitivamente a su desaparición:
·        Guerra de Marruecos. En el reparto colonial de África, entre España y otras potencias, no fue muy viable. Y cabe destacar el  desastre de Annual en 1921 con 8000 muertos españoles. Una guerra tan larga y sangrienta dejó profundas consecuencias:
o      La Semana Trágica de Barcelona (1909). Fue una insurrección popular que tiene lugar en la capital catalana debido a  la movilización de reservistas catalanes para la Guerra de Marruecos.
·        Crisis de 1917. militar, política y social, donde destacó el movimiento obrero y la participación de sindicatos.

Regeneracionismo.

Se llama regeneracionismo al movimiento intelectual que entre los siglos XIX y XX medita objetiva y científicamente sobre las causas de la decadencia de España como nación. Conviene, sin embargo, diferenciarlo de la Generación del 98, con la que se le suele confundir, ya que, si bien ambos movimientos expresan el mismo juicio pesimista sobre España, los regeneracionistas lo hacen de una forma objetiva, documentada y científica, mientras que la Generación de 1898 lo hace en forma más literaria, subjetiva y artística ( buscan una renovación cultural y estética). Su principal representante fue el aragonés Joaquín Costa con su lema «Escuela, despensa y doble llave al sepulcro del Cid».
El regenaracionismo, significó las primeras críticas al régimen de la Restauración, es el primer movimiento de reacción ante la situación de crisis vigente y un intento de solucionar, no sólo por parte de quienes estaban marginados de él (nacionalistas y obreros), sino por parte de la burguesía media y los intelectuales. Busca esencialmente democratizar la política acabando con el caciquismo, y afrontar definitivamente los grandes males de fondo: educación, Hacienda, reforma agraria, problema social, nacionalismos...
Muchos de sus representantes de la Generación del 98 estaban ligados a la Institución Libre de Enseñanza, que dirigía Francisco Giner de los Ríos. Joaquín Costa fue uno de ellos, especializado en Historia en un principio.
Esta institución seguía el siguiente lema: "La Institución Libre de Enseñanza es completamente ajena a todo espíritu e interés de comunión religiosa, escuela filosófica o partido político; proclamando tan solo el principio de la libertad e inviolabilidad de la ciencia, y de la consiguiente independencia de su indagación y exposición respecto de cualquiera otra autoridad que la de la propia conciencia del profesor, único responsable de sus doctrinas".
Ángel Ganivet García, escritor y diplomático español. Se le considera, por su incertidumbre vital y por su angustia espiritual, precursor simbólico de la Generación del 98, proyectando su lucha interior en su visión de España en su obra Idearium español, donde interpreta a España como Virgen dolorosa rodeada de la cultura positivista y escéptica del siglo XIX.

Influencias filosóficas europeas de la época sobre la Generación del 98: Existencialismo.

Contagiados de la filosofía europea del siglo XIX, aunque cada uno tiene sus preferencias los autores de la Generación del 98 son eco y síntesis de las filosofías europeas. Vivirán el enfrentamiento entre la razón y el sentimiento del siglo XIX. Ruptura radical con el pensamiento tradicional (religioso), son escépticos, agnósticos, racionalistas.

Los pensadores más sobresalientes que nos llevará al existecialismo son: el mayor filósofo, como iluminador de todos es Nietzsche, talante vitalista del grupo que influye sobre Baroja y Maeztu. También influencia clara de Bergson en Machado, filosofía de la vida; Schopenhauer (Baroja); y Kierkegaar sobre Unamuno, con el pensamiento protestante liberal europeo.

Serán escritores que reflexionan, además de sobre la regeneración, sobre la vida como problema, o el problema existencial de la vida. Filosofía de la existencialidad.